El riesgo de las apuestas por Internet

El mundo de las apuestas siempre ha sido arriesgado, la línea que separa el entretenimiento de la adicción es muy delgada y desgraciadamente son muchas las personas que la traspasan.
Con la aparición de las apuestas por Internet este riesgo se ha incrementado notablemente. Son muchísimas las páginas que se dedican a las apuestas y el alcance es enorme, porque llegan a cualquier persona, de cualquier condición y edad.
En un principio, el ‘boom’ de las apuestas lo protagonizaron los casinos virtuales, con todo tipo de juegos de azar característicos de los casinos y más. Pero quizá su alcance no sea completamente general, no llega igual a toda la población. Muchas personas temen no entender el funcionamiento de estos juegos y nuestro sentido de la precaución hace que ni siquiera los probemos.
Pero el mundo de las apuestas por Internet ha dado en los últimos......
tiempos un gran paso, las apuestas deportivas de todo tipo y particularmente las que se realizan en directo.
Quien no haya utilizado estas páginas o navegado por ellas no imagina la cantidad de posibilidades que ofrece actualmente para apostar nuestro dinero. Para cada evento deportivo encontramos posibilidades para apostar a ‘TODO’.
En fútbol: resultado final, resultado a la media parte, quién meterá el primer gol, el minuto en que lo meterá, etc.
Para tenis: para un determinado torneo, quién ganará, quiénes llegarán a la final, a cuartos, a octavos, incluso para cada partido se puede apostar cómo quedará el tanteador para cada set. Y todo esto, además en directo. Te permite apostar hasta el último momento.
Las opciones son casi ‘infinitas’. Y las páginas para apuestas las encontramos a miles. Las hay especializadas o generales. Nos ofrecen bonos gratuitos iniciales para atraer nuestra atención. Y todas nos explican lo fácilmente que podemos ganar dinero. Por ejemplo ésta es una página donde encontramos una gran variedad de juegos de azar y apuestas deportivas de todo tipo.
* La imagen corresponde a esa Web.
Para jugar sólo es necesario registrarse y habilitar un método de pago. Y este es el aspecto más preocupante. En ningún momento se comprueba fehacientemente si la persona es menor de edad. Queda advertido en la página la prohibición del juego a menores y que si descubren que el usuario es un menor le desactivarán la cuenta y ‘perderá todos los derechos de las ganancias obtenidas.’
Pero resulta evidente que esto no va a detener a un joven curioso con ganas de hacer ‘dinero fácil’. Yo al menos conozco un caso de un chaval de 15 años que apostó en este tipo de páginas sin conocimiento de sus padres. Lo descubrieron pasado un tiempo, cuando aparecieron cargos en su cuenta bancaria.